viernes, diciembre 6, 2024
Marketing

Marketing Estacional: Cómo las tiendas optimizan el espacio de exhibición

Descubre el Marketing Estacional y cómo las tiendas optimizan sus espacios de exhibición:

Cambios en el Uso de los Espacios de Exhibición Según la Estacionalidad: Marketing Estacional

Dime, ¿no te ha pasado? Hace poco, debido a un viaje inesperado, me encontré buscando ropa de invierno en pleno verano, solo para descubrir que los estantes estaban llenos de trajes de baño y bloqueadores solares. O quizás, te ha pasado que, a último momento, dos días antes de Navidad, decides decorar tu hogar y, para tu sorpresa, ¡no queda ni una sola decoración navideña!

En este post te hablaré de los frecuentes cambios en el uso de los espacios de exhibición según la estacionalidad.

La estrategia de las grandes tiendas y supermercados:

Los supermercados son más que simples lugares para comprar productos de uso diario; en su diseño y planificación se oculta una estrategia meticulosa que busca maximizar cada centímetro de espacio. Este uso del espacio no es fijo, sino que se transforma constantemente para adaptarse a la época del año, creando una experiencia de compra alineada con las necesidades y deseos de los consumidores. Las festividades como Halloween, Navidad, vacaciones escolares y hasta las estaciones del año, influyen de manera directa en cómo los productos se organizan, exhiben y rotan dentro de los supermercados.

La planificación de los espacios responde a una estrategia que va más allá de la simple exhibición de productos. Se trata de contar una historia que, en cada momento del año, se alinea con las emociones, celebraciones y hábitos de compra de los consumidores.

La estacionalidad en publicidad se refiere a la práctica de ajustar las campañas publicitarias y las estrategias de marketing en función de las diferentes temporadas o eventos que ocurren durante el año. Las marcas y empresas adaptan sus mensajes, productos y promociones para alinearse con las necesidades, intereses y comportamientos de los consumidores en momentos específicos, como festividades, estaciones climáticas, o grandes eventos sociales y deportivos.

El ciclo de estacionalidad en un supermercado y también en las grandes tiendas por departamentos, comienza con la planificación de las promociones y la rotación de productos clave según las fechas importantes en el calendario. Eventos como Halloween, Navidad, las vacaciones de verano, el regreso a clases, e incluso los cambios de estación, dictan qué productos se exhiben en los lugares más visibles y estratégicos.

Por ejemplo, a finales del verano, empiezan a reorganizar sus estantes para dar paso a los productos escolares, preparándose para el regreso a clases. Las mochilas, cuadernos, lápices y uniformes dominan las áreas de mayor visibilidad, mientras que los productos parcialmente asociados al verano —como protectores solares o ropa de baño— comienzan a desaparecer paulatinamente de los estantes.

La capacidad de anticiparse a las necesidades del consumidor es clave. El supermercado crea una narrativa visual que acompaña al comprador, ayudándole a recordar lo que podría necesitar para la próxima temporada o festividad. Esta organización del espacio no es aleatoria, sino fruto de estudios de mercado y análisis del comportamiento del consumidor, que buscan generar ventas de manera eficiente.

Marketing Estacional: Halloween

Uno de los momentos clave en el calendario es Halloween. A partir de septiembre, las tiendas comienzan a inundarse con calabazas, disfraces, dulces y decoraciones temáticas. El espacio dedicado a estos productos aumenta considerablemente a medida que se acerca el 31 de octubre. Durante esas semanas, otras categorías de productos, como los de temporada regular, pueden ver reducida su exposición para ceder lugar a los artículos de Halloween.

Este fenómeno no solo responde a una alta demanda, sino también a una estrategia bien planificada de gestión del espacio. Las tiendas y supermercados saben que Halloween genera una compra impulsiva y estacional (en algunos países), por lo que colocan estos productos en áreas de fácil acceso y alta visibilidad. No es casualidad que los disfraces y los dulces aparezcan en la entrada principal o cerca de las cajas, lugares estratégicos donde los compradores pueden adquirirlos rápidamente.

Una vez que pasa Halloween, el espacio dedicado a estos productos es reemplazado de manera casi inmediata por los artículos de la próxima gran festividad y eventos de descuentos, como el Día de Acción de Gracias (en Estados Unidos), el Black Friday, e inmediatamente después, las decoraciones navideñas. Los productos que no se vendieron se retiran o liquidan a precios bajos, ya que mantenidos en el inventario generan un costo innecesario. Por cierto, ¿conoces la historia de Santa Claus? ¿Es un invento de Coca-Cola?

Marketing Estacional: Navidad

La temporada navideña es probablemente la más extensa en cuanto a preparación, ya que las tiendas y supermercados comienzan a planificarla desde mucho antes de diciembre. A partir de mediados de noviembre, las decoraciones, los alimentos típicos y los regalos navideños comienzan a llenar las estanterías. Este cambio en el espacio refleja no solo la demanda estacional, sino también la importancia que tiene la Navidad en términos de volumen de ventas.

Al igual que con Halloween, el espacio destinado a la Navidad está cuidadosamente calculado. Los productos navideños tienen un tiempo limitado en los estantes, ya que una vez pasada la fecha, pierden relevancia y, lo que es peor, ocupan espacio que podría utilizarse para otros productos. Por eso, después de la Nochebuena, se retirarán rápidamente para dar lugar a las promociones de Año Nuevo o incluso a los primeros productos de la temporada de verano.

Marketing Estacional: Vacaciones de Verano

Otro ejemplo claro de esta estrategia en el uso de los espacios de exhibición según la estacionalidad, es la transición entre las vacaciones de verano y el regreso a clases. Durante el verano, las tiendas y supermercados llenan sus estantes con productos asociados a actividades al aire libre, como artículos de picnic, bloqueadores solares, trajes de baño y productos para barbacoa (o asado, como se le conoce en Argentina, Chile y Uruguay; o parrilla/parrillada, como se le dice en Venezuela y otros países). Sin embargo, a medida que se acercan las fechas de inicio escolar, estos artículos ceden el protagonismo a útiles escolares, mochilas y uniformes.

La transición entre temporadas no ocurre de la noche a la mañana, sino que se planifica con antelación. Así, la clave está en equilibrar cuidadosamente el inventario para evitar quedarse con productos de verano justo cuando los consumidores ya están enfocados en el regreso a clases. De esta forma, optimizan el espacio y maximizan las ventas de los productos que son relevantes en cada momento.

Cambios en el uso del espacio de exhibición

Y así como sucede con festividades estacionales o eventos de grandes descuentos, los eventos deportivos internacionales impulsan a los supermercados y tiendas a reorganizar sus espacios y enfocarse en productos relacionados con el entretenimiento en el hogar, la comida y la celebración.

La Copa Mundial de Fútbol o los Juegos Olímpicos son ejemplos de ello. Los supermercados y tiendas ajustan sus espacios y promociones para alinearse con el interés y la demanda generada por estos eventos. El Super Bowl es otro de esos eventos deportivos destacados dentro del marketing estacional. De hecho, es uno de los momentos más esperados por las marcas y anunciantes en Estados Unidos y a nivel global.

Durante estos eventos, es común ver que las tiendas dedican mucho espacio a productos asociados con reuniones en casa, como cervezas, refrescos, snacks, carnes para parrillas. Todo lo necesario para organizar reuniones para ver los partidos o competencias en casa con amigos o familiares. Se exhiben artículos con motivos relacionados al evento deportivo, como camisetas, gorras, banderas y otros accesorios. Hay descuentos en televisores, sistemas de sonido y otros dispositivos electrónicos, ya que muchas personas buscan mejorar su experiencia de visualización para seguir los eventos deportivos desde casa.

Marketing Estacional

El 4 de julio en Estados Unidos es una fecha que conlleva una intensa actividad de marketing estacional. Este día, que celebra la independencia del país, es uno de los eventos más grandes del año en términos de festividades y oportunidades comerciales. Al igual que ocurre con otras fechas patrias en distintos países, las marcas y empresas aprovechan esta ocasión para lanzar campañas publicitarias específicas, promociones y ventas especiales que atraen a los consumidores.

En Chile, para citar otro ejemplo, la llegada de las Fiestas Patrias, que coincide con el inicio de la primavera en el hemisferio sur, marca uno de los momentos más importantes del año en términos de marketing estacional. Las Fiestas Patrias, celebradas el 18 y 19 de septiembre, son una festividad profundamente arraigada en la cultura chilena, donde se conmemora la independencia del país. Este período no solo trae consigo un ambiente de celebración y orgullo nacional, sino también una gran oportunidad para que las marcas adapten sus estrategias de marketing.

Durante estas fechas, las campañas publicitarias se enfocan en productos tradicionales y relacionados con la celebración, como la comida típica chilena, especialmente el asado (barbacoa), empanadas y buen vino. Las tiendas de alimentos y supermercados realizan grandes promociones en carnes, verduras y productos para parrillas, esenciales para las reuniones familiares y sociales que caracterizan estas festividades. Además, es común ver una explosión de promociones en productos como banderas chilenas, decoraciones patrias, trajes típicos y accesorios para adornar los hogares y espacios públicos.

Marketing Estacional

Uno de los factores más importantes que influyen en la rotación de productos y el uso del espacio en los supermercados y grandes tiendas es el costo de almacenamiento. Mantener los productos que ya no están en temporada puede resultar costoso para los minoristas. Cada metro cuadrado dentro del almacén tiene un valor, y ocuparlo con productos fuera de temporada implica un gasto que puede afectar las ganancias.

Por eso, estos establecimientos prefieren liquidar los productos estacionales a precios bajos antes de almacenarlos por mucho tiempo. Esto no solo reduce el costo de almacenamiento, sino que también permite liberar espacio para las próximas promociones. De hecho, gran parte de la planificación estacional gira en torno a este principio: exhibir los productos que se ajustan a la demanda actual y retirar aquellos que ya no generan interés.

Todo lo que hemos discutido sobre el uso de los espacios de exhibición según la estacionalidad en supermercados y grandes tiendas por departamentos, de acuerdo a festividades, estaciones o eventos importantes, es parte de lo que se conoce como marketing estacional. Este tipo de marketing consiste en ajustar las estrategias de ventas, publicidad y promociones según las diferentes temporadas o eventos que impactan el comportamiento de los consumidores a lo largo del año.

El uso del espacio en los supermercados es una estrategia cuidadosamente orquestada que se adapta a la estacionalidad y a las festividades y eventos a lo largo del año. Desde Halloween hasta las vacaciones escolares, cada momento tiene su propio protagonismo en los estantes, mientras que los supermercados ajustan su oferta para aprovechar al máximo la demanda de los consumidores.

La clave del éxito de esta estrategia está en la planificación precisa, la rotación rápida de productos y la optimización de cada metro cuadrado disponible. Los supermercados no solo venden productos, sino que también cuentan historias a través de la disposición de sus estantes, anticipándose a las necesidades de sus clientes y asegurándose de que, en cualquier época del año, encuentres exactamente lo que estás buscando, mientras se mantiene bajo control los costos de almacenamiento y espacio.

Jesus Osilia

Con más de 30 años de experiencia en diversos sectores, mi trayectoria profesional ha estado relacionada con la venta de productos y servicios, marketing digital y control de procesos operativos y logísticos. Mi formación en logística y administración empresarial se complementa con una pasión por el copywriting y el storytelling.

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